Bueno, esta es la primera entrada de, espero, muchas otras. Voy a iniciar la narración de cómo me voy a recuperar de una recaída en la Leucemia Linfoblástica Aguda. Parecía que ya habíamos acabado con ella, pero no, no ha podido ser sólo con dos años, dos meses y dos días de tratamiento de quimio, desde el 24 de septiembre de 2013 al 26 de noviembre de 2015. Casi nada. Pero quiere seguir dándome guerra. Así me lo han dicho el pasado día 23 de noviembre de 2016. Ha sido un palo gordísimo, no voy a engañaros. ¡Ya tenía cita para que me retiraran el reservorio del pecho! Tengo que volver a empezar, otra vez, con mucha quimioterapia. Y ahora, encima, radioterapia y trasplante de médula. Buffffffffff!!!!!!!!!!!!!!!!!!! Sé que va a ser muy duro, lo sé, pero estoy convencido de que es el primer paso para mi definitiva recuperación. Así que, ¡allá vamos!
